El gobierno y la prensa: La libertad condicionada

Los hechos que marcaron el fugaz paso de Frecuencia Latina (Canal 2) por la oposición periodística han puesto sobre el tapete, de manera dramática, la relación del gobierno con los medios de comunicación masiva.

Durante los gobiernos de Fernando Belaúnde Terry y Alan García, las dificultades que enfrentaban los periodistas para ejercer su labor se producían, sobre todo, en las "zonas de emergencia". Tampoco faltaban las amenazas y atentados atribuidos a personal policial y militar, acusado de cometer abusos contra los derechos humanos.


Sin embargo, nunca antes como en el gobierno de Alberto Fujimori los medios de oposición habían atribuido tanto al régimen una voluntad de someterlos a sus planes de información e imagen. También se habló con frecuencia de que el régimen recurría a la intimidación y a presiones de diverso tipo para lograr sus objetivos.

A excepción del episodio de la intervención militar en los medios tras el autogolpe del presidente Alberto Fujimori el 5 de abril de 1992, su gobierno se ha cuidado de evitar una censura de prensa abierta, para no enfrentarse con la comunidad internacional, que ya muestra desconfianza ante su estilo autoritario. No obstante, la apertura de prensa que permite expresiones críticas ha sido motivo de múltiples confrontaciones con una administración que implementó un programa económico neoliberal, priorizó el aspecto militar en la estrategia contrasubversiva y busca perpetuarse más allá del año 2000.

Ante la imposibilidad de censurar abiertamente a la prensa, el régimen ha recurrido a otros mecanismos cuyo objetivo ha sido, si no ganar, al menos neutralizar a los medios periodísticos.

Estrategia gubernamental frente a los medios

Según Mirko Lauer, columnista de La República, la estrategia gubernamental frente a los medios ha pasado por distintas etapas, dependiendo de la ubicación política del régimen en las preferencias de la opinión pública y de los propios órganos de prensa, así como de los objetivos trazados por el gobierno en cada momento. La etapa actual se caracteriza como una ofensiva, marcada por los peligros que se ciernen sobre la nunca desmentida intención del presidente Fujimori de reelegirse por segunda vez al finalizar el siglo. 

Entre estos peligros se incluyen:

  • La caída de su popularidad, parcialmente causada por el programa económico del ministro Camet y los escándalos de los militares.

  • La oposición mayoritaria de la población a la reelección.

  • El surgimiento de la figura del alcalde Alberto Andrade.

  • La incomodidad en el gremio empresarial, que considera que la reelección de Fujimori sería costosa debido a las dádivas públicas necesarias para mejorar su imagen.

  • La oposición del gobierno norteamericano, que no desea una presencia militar fuerte en el gobierno.

  • Métodos del gobierno para controlar los medios.

El gobierno utilizó una variedad de mecanismos para controlar a los medios:

Canjes de deudas tributarias por apoyo mediático: Desde 1993, el régimen ofreció eliminar deudas fiscales a cambio de cobertura mediática favorable, extendiéndolo incluso a medios opositores como La República.

Presiones publicitarias: Daniel Borobio, encargado de la publicidad gubernamental, señaló que las decisiones sobre dónde colocar avisos oficiales dependían de la actitud de los medios hacia el gobierno, favoreciendo a los alineados y excluyendo a los opositores.

Discriminación informativa: Se negaba acceso a información oficial y cobertura de eventos importantes a medios críticos, mientras que los afines al régimen recibían exclusivas y primicias.

Ataques directos e indirectos: Desde amenazas anónimas hasta declaraciones públicas del presidente y el Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, pasando por atentados sospechosos y procesos judiciales contra periodistas críticos.

Control de entrevistas: Nicolás Lúcar, conductor de La Revista Dominical, denunció que cada entrevista con Fujimori era previamente negociada por la oficina de prensa de Palacio, determinando preguntas, entrevistadores y orientaciones favorables al gobierno.

Objetivos del régimen

Los principales objetivos de estas acciones fueron:

Controlar la narrativa mediática: Asegurar una posición favorable o neutral de los medios hacia el gobierno mediante presiones informativas y publicitarias.

Intimidar a periodistas críticos: Operativos atribuidos al SIN, procesos judiciales y ataques públicos buscaban silenciar las voces disidentes.

Restringir el ejercicio profesional: Normas legales, mutismo oficial y bloqueos de información pública limitaban la labor periodística independiente.

Conclusiones

El manejo de los medios por parte del régimen de Fujimori no solo buscó consolidar el poder, sino también limitar las voces disidentes en un contexto de baja popularidad y objetivos reeleccionistas. Según los análisis de Zileri y Lauer, el control mediático fue parte de una estrategia sistemática y de alto nivel, con actores clave como Vladimiro Montesinos y el SIN involucrados. 

Este control mediático reflejó una combinación de estrategias de presión indirecta y acciones abiertas que buscaban consolidar una imagen favorable al régimen, generando descontento tanto a nivel local como en la comunidad internacional.


Por: Hernando Burgos
Editado por pegaso125