Nayib Bukele y el Sistema Interamericano: Seguridad vs. Derechos Humanos

 Nayib Bukele no ha llevado a cabo una retirada formal de El Salvador del Pacto de San José ni de la jurisdicción de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH). 

Sin embargo, su gobierno ha tenido tensiones significativas con el sistema interamericano debido a las críticas por presuntas violaciones de derechos humanos, especialmente relacionadas con el régimen de excepción instaurado para combatir las pandillas. Este régimen ha resultado en miles de detenciones masivas y denuncias de abusos, lo que ha provocado preocupación en organismos internacionales como la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).


Contexto y Críticas

Medidas de Seguridad:

Bukele ha argumentado que las medidas extremas, como el régimen de excepción, son necesarias para garantizar la seguridad pública. Según su gobierno, estas políticas han reducido drásticamente los índices de criminalidad.

No obstante, organismos internacionales han señalado que estas acciones han llevado a violaciones de derechos fundamentales, incluyendo arrestos arbitrarios y condiciones inhumanas en las cárceles.

Respuesta a las Críticas:

Bukele ha acusado a la CIDH y otros organismos internacionales de estar más preocupados por los derechos de los delincuentes que por los de las víctimas de la violencia en su país. Este argumento ha calado en ciertos sectores de la población que valoran la seguridad sobre otros derechos.

Obligaciones Jurídicas:

Si El Salvador optara por retirarse del Pacto de San José, seguiría estando obligado a cumplir con los fallos y resoluciones emitidos por la Corte IDH hasta el momento de su salida. Casos pendientes o en curso permanecerían bajo la jurisdicción del sistema interamericano​

Implicaciones de un Posible Retiro

Jurisdicción Internacional:

Retirarse del Pacto implica renunciar a la protección del sistema interamericano para sus ciudadanos, lo que podría dejar vulnerables a las víctimas de violaciones de derechos humanos.

Sin embargo, no sería una salida inmediata: los casos de abusos cometidos durante la membresía seguirían siendo investigados y sancionados por la Corte IDH​.

Ejemplo de Trinidad y Tobago:

Este país se retiró del Pacto en 1999 tras negarse a acatar un fallo sobre la pena de muerte. Su experiencia demuestra que el retiro puede proteger políticas internas controvertidas, pero a costa de la reputación internacional y el acceso de los ciudadanos a mecanismos de justicia transnacionales.

En resumen:

Aunque el gobierno de Bukele mantiene tensiones con la Corte y la CIDH, El Salvador sigue siendo parte del sistema interamericano, y cualquier movimiento hacia el retiro tendría profundas implicaciones legales y políticas.

Por:pegaso125